La energía no es continua, sino que viene en paquetes discretos llamados cuantos. La energía [latex]E[/latex] de un único cuanto de radiación electromagnética (un fotón) es directamente proporcional a su frecuencia [latex]\nu[/latex]. Esta relación se define mediante la relación de Planck-Einstein, [latex]E = h\nu[/latex], donde [latex]h[/latex] es la constante de Planck. Este concepto supuso un reto fundamental para la física clásica.
